TUS MANOS,

tu herramienta

Hay un tema especial que vamos a conversar hoy y que es tan importante como otros que hemos revisado en este Blog. No se trata esta vez de materiales, de tejidos o de colores, sino más bien de la salud, de tus manos, y de la mejor manera en que podemos cuidar esta importante herramienta de nuestro cuerpo que nos permite llevar todas nuestras ideas a la realidad.

Hace algunas semanas me escribieron pidiendo recomendaciones para este tema. Eso, porque esta amiga tejedora sufre cada vez que se dispone a crochetear, y si somos serias en esto, tejer con dolor o molestias es una pésima manera de encantarse con este oficio… no hay nada peor que realizar una acción y que tengamos una mala experiencia, sobre todo si se traduce en un malestar físico.

IMPORTANTE*

Yo no soy doctora ni he trabajado en el área de la salud, no es lo mío, soy arquitecta, estudiosa y busquilla, así que considera que lo que he plasmado aquí es en base a la lectura de estudios, recomendaciones y charlas de tejedoras del área que sí han dado clases del tema. Yo te cuento lo que he aprendido en el camino, y me parece que puede ser un buen punta pie de inicio para ti, y sobre todo si estás entrando a este mundo del tejido.

Hablemos de dolores comunes...

Realizar una actividad que te mantiene básicamente estática, en una posición sentada o semi acostada y en donde las manos, muñecas, codos y brazos son las partes de nuestro cuerpo que más se exponen ejerciendo una fuerza o movimiento corto constante, puede traer como consecuencia muchos malestares que si no se tratan o prevén a tiempo pueden terminar muy mal.
Dentro de los dolores y malestares más comunes, si los ordenamos en una escala de molestia tenemos:

Pequeños calambres:

Calambres: Éstos se producen generalmente por la tensión que usamos al tejer y a veces no nos damos cuenta de la fuerza o mala manera en que tomamos el crochet. Al finalizar tu tiempo de tejido puedes sentir los dedos un poco acalambrados y a veces ese dolor se puede intensificar y proyectar hacia arriba (manos u otro).

Dolor en las muñecas y/o articulaciones:

Producto de la misma tensión en los dedos, este dolor también puede ocurrir en tus muñecas o articulaciones. La movilidad se ve reducida cuando tejemos y la falta de movimiento de rotación de tus muñecas puede producir molestias.

Otros dolores mayores:

Así como cuando nos duele la espalda cuando estamos muchas horas frente al computador, y ese dolor o molestia se irradia hacia el cuello y hombros, esto mismo puede pasar con tus manos, codos, hombros, e incluso cuello cuando estamos tejiendo en una mala postura. Esperemos nunca llegar a un momento así y si el dolor es muy intenso y constante, podríamos estar frente a un caso médico a revisar.

El dedo pulgar:

No tengo certeza absoluta del cómo ni por qué hay casos en que el dolor se enfoca en el dedo pulgar de la mano fuerte, pero de que lo he escuchado, sí existe y puede ser un indicador del cómo estás trabajando con tu crochet.

¿QUÉ PODEMOS HACER?

Bien, las siguientes consideraciones, repito con énfasis, son recomendaciones adquiridas con los años de trabajo a través de diversos medios, no es una receta, no es la fórmula médica perfecta, no reemplaza la opinión de un profesional médico, son acciones que podrán ayudarte a tener en cuenta cada vez que vayas a tejer, y por supuesto, cada vez que dejes de tejer.

RESPETAR TIEMPOS INTERMEDIOS

Así como estar sentado frente el po muchas horas continuas no es recomendable, lo mismo ocurre cuando te dispongas a tejer. La movilidad es fundamental. Si estás pensando en tejer muchas horas viendo una película, serie o necesitas tejer un tiempo extendido por el motivo que sea, busca espacios intermedios.

Cada 15 o 20 minutos, para de tejer, levántate, anda a buscar un té, café, mueve tus manos y muñecas, estira las piernas y luego vuelve a tu trabajo. La movilidad constante es la que evitará los calambres posteriores.

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EJERCICIOS

básicos

Así como la movilidad y hacer pausas es fundamental, realizar ejercicios cortos pero efectivos es una de las mejores consideraciones. Puedes hacerlos antes y después de tejer y no te tomará más de 5 minutos. Por supuesto que ejercicios hay muchísimos, yo te mencionaré los que hago generalmente:

Lava tus manos:

Todo tejido debe ser manipulado con cariño y limpieza.

Crema de manos:

Y también usa de cuerpo o un aceite de masaje y aplica una pequeña porción en ellas. Esto ayuda mucho a varias cosas, calentamos las manitos, lubricamos los deditos, hidratamos la piel y además nos quedará un aroma agradable.

Masaje cortito:

cortito. Masajea tus manos y dedos con la crema para que se absorba un poco.

Movimiento de muñecas:

Haz este movimiento en círculos. Mueve las muñecas de ambas manos lentamente en círculos, separadas.

Estiramientos:

Junta las manos entrelazando los dedos, y estira tus brazos. Estira, estira, estira tus dedos como si trataras de alcanzar el horizonte.

Movimientos:

Haz movimientos de muñecas y manos juntas. Junta las manos y entrelaza los dedos formando un puño como cuando juegas voleibol. Mueve en forma circular ambas manos y muñecas al mismo tiempo.

Descansos:

Vuelve a masajear tus manitos y dedos y ya estás lista para empezar a tejer.

MANGOS

ergonómicos

Este punto puede ser controversial, porque tengamos claro que no a todas nos puede pasar lo mismo con las mismas agujas, así que lo dejo como tercera consideración.

He observado que hay una gran diferencia entre los crochet con mango y los que no poseen uno para sujetarlos, sobre todo cuando se trata de crochet pequeños (del número 3 hacia abajo). Si ves la diferencia entre los modelos, los crochet que no tienen mango incorporado (de goma, de arcilla, de silicona, etc.) tienen un cuerpo muy delgado también, lo que significa que nuestra mano y dedos tratarán de hacer una adaptación a esa forma, probablemente usando más fuerza de la necesaria para que no se escape, y aquí el dolor es inminente. Si comparamos esta situación a los crochet con mango incorporado, generalmente un mango ergonómico (la marca la decides tú) ayuda en un 99% a la experiencia de tejido (así de segura estoy) y la razón es muy lógica, entre menos presión, flexión y tensión le des a tus dedos y muñeca, más libre podrá moverse la extremidad y por ende, puedes reducir la incomodidad a una gran escala.

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